miércoles, 3 de enero de 2007

Gracias

Ni siquiera sé por dónde empezar

para darte las gracias por existir.

Ya ni si quiera recuerdo

en el momento en que te conocí,

pero muchos años han pasado ya

y aun sigo descubriéndote mil sensaciones

maravillosas.

Tenerte siempre a mi lado

son mis ganas de vivir,

de respirar, de llorar, de sonreir.

Tú, que siempre estás ahí.

Tú, que me entiendes mejor que nadie.

Gracias por dejarme dormir cada noche

en el centro de tu ser.

Por compartir los mejores

y peores momentos de mi vida.

Gracias a quien te puso en este mundo

porque después de preguntas sin respuesta

he entendido que la respuesta eres tú.

He entendido que si vivo en este mundo

del cual no entiendo apenas nada

es porque quiso que coincidiéramos.

Y después de perder tantas y tantas veces

tú eres mi única victoria.

Ni siquiera estas palabras expresan

lo que me gustaría expresar.

Sólo con una de mis lágrimas

quizás se pueda entender.